La Fiesta de la Montaña

¡Que vienen las brujas!

La Fiesta de la Montaña es una de las celebraciones más peculiares y con mayor duende del municipio de Breña Baja y de toda la Isla de La Palma. El origen de la fiesta data del 18 de junio de 1966, con motivo de la inauguración la carretera que llegaba al pico de La Montaña de La Breña. Con el tiempo ha incorporado la magia de la tradición oral, cuentos y leyendas sobre brujas que bajaban al pueblo, creando un clima de misterio que dota La Fiesta de la Montaña de una personalidad sinigual.

El gran día de la Fiesta de la Montaña es el sábado, cuando las Brujas se erigen en protagonistas. Primero, con la Subida de la Bruja, creada en 2016 coincidiendo con el 50 aniversario dela Fiesta, una particular romería que une la Sociedad “Balcón Canario” de Las Ledas hasta La Montaña, como antesala a la Gran “Noche Mágica de Brujas”.

Horas después, ya en mitad de la Fiesta, basándose en antiguos cuentos orales sobre brujas y encantamientos que guarda La Montaña, que pasan de mayores a niños, un aquelarre de brujas desciende Montaña abajo, sorprendiendo a los asistentes durante la Fiesta y asustándolos con sus fechorías.

La Noche Mágica de las Brujas nace de la mano de un grupo de mujeres del barrio empiezan a vestirse de viejecitas y brujas en varios actos de la fiesta, en torno al año 2000. Desde 2007, un grupo de jóvenes de la comisión de fiestas refuerza esta idea, dando lugar a la “Noche Mágica de Brujas”, que bajo luces y sencilla pirotecnia, el recinto de baile se llena de brujas.

Actualmente, es sin duda el acto más popular de la fiesta, dotando de mística a una espera que se ve amenizada con actuaciones musicales. Además, durante la Fiesta se completa con otros actos como carreras de caballos, actuaciones de humor, concentración de motos y coches anitguos, Concursos de Licores y Postres…

Y poco a poco va acumulando algunas tradiciones, como el alumbrado de la Cruz de La Montaña en torno a la Romería de Santiago Apóstol (acto de la Fiesta de Santiago Apóstol y Santa Ana), que se visibiliza en casi toda la comarca, y que se mantiene encendida hasta la propia fiesta de La Montaña.

Si bien durante sus primeros años se celebró en agosto, desde mediados de los 70, la Fiesta de la Montaña se traslada al fin de semana siguiente a las Fiestas Copatronales de Santiago Apóstol y Santa Ana (25 y 26 de julio), la fiesta con más popularidad del municipio.

En los 80 y principios de los 90, la Fiesta se celebra de forma intermitente hasta que en 1996, promovido por el ayuntamiento, se forma y se va estabilizando, con los años, una comisión de fiesta. Los actos pasan de realizarse en el pico de La Montaña al área recreativa ganando en seguridad, protección medioambiental y posibilidad de hacer actividades con un mayor número de personas. La fiesta se ha mantenido todos estos años a excepción de años de Bajada de La Virgen o por incidencias climatológicas.